Perfiles: El muñeco vudú





¡¡Ay diosito querido qué cosas nos ocurren a las solteras actuales!! 

En esta selva oscura y peligrosa, a veces las amenazas vienen disfrazadas de hombres guapos y dulces, que parecen oro, pero son del que "cagó el moro" como se recoge en el refranero español, a veces soez pero de eficiencia probada.
Hablaba yo hace un tiempo en mi sección perfiles del cachorro abandonado. Pero hoy hablaré del padre, del amo, del maestro de maestros en esto de los solteros encapuchados que asaltan corazones a mano armada, sin piedad y dejando daños colaterales allí por donde pisan.

Como sabréis por la cultura popular, las series y el cine, los muñequitos vudú son obra de una persona que desea cierto mal a otra y que gracias a poderes sobrenaturales, consigue ejercer su voluntad a través de esta representación en papel, tela, paja, etc. de la víctima en cuestión. 
Pues mi perfil de hoy desea, quiere, persigue ser el muñequito puñetero para que le hagan toda suerte de maldades. 
Les pirran las locas de atar que les amargan la existencia, les ningunean, les anulan, les controlan y hacen con ellos lo que les place. 
En determinado momento, despiertan de su tóxico trance y se dan cuenta de que eso no es sano, pero es difícil desengancharse y lograr salir del círculo de sangre y fuego en el que les tenían retenidos. Pero bueno, al final lo logran. 
Estos chicos sólo conocen el amor desvirtuado y tóxico que les han proporcionado esas mujeres, entonces lo que se conoce por "relación sana" es un mito como el del Yeti o el del Chupacabras en su experiencia.
Los patrones se repiten una y otra vez, siempre atraídos por el mismo tipo de mujeres. 

Dicen que a nosotras nos van los "malotes" pero ellos se flipan mucho con las locas tóxicas. 
Claro, tú llegas a su vida como un bálsamo. Les cuidas, les mimas,...se sienten cómodos contigo, pueden ser ellos mismos. Son dulces, agradables, caballerosos, sexys,...son perfectos hasta que abren la bocaza para decirte que salen de una relación muy tormentosa y que no saben muy bien lo que quieren, que están hechos un lío, que se sienten sin fuerzas pero...que a pesar de todo, están genial contigo. Ese es su plan de escape, su seguro de vida, ya te lo han dicho y han cumplido con su conciencia.

Es una versión más de chocolomo masculino: ellos no dan nada, tú lo das todo. Perfecto. Es genial. Redondo, porque no invierten y encima salen ganando. El negocio les sale a cuenta. 
Si eres una inocente de manual, seguirás con la esperanza de enamorarlos, de que valoren tus esfuerzos y lo mucho que les cuidas. Cada detalle suyo es escaso pero cuando llega es un locurón que te lleva a creer que se está enamorando de ti. Pero no querida, no...hoy sientes que te adora, pero mañana pasa de tu culo, y pasado, y el otro también aunque tu sabes que no está muerto, solo estaba de parranda. Reaparecerá cuando le da la gana y tú que has estado tres días enganchada al móvil esperando señales de vida, te quedarás con cara de pánfila suprema haciendo ojitos de corazón como los iconos del whatsapp ante la primera "cucada" que te diga.
Si a las primeras señales de "negocio perfecto" tú te mosqueas y le pones las cartas sobre la mesa, llega el momento clave y harán como los políticos: hablarán mucho y no dirán nada. Lo que se conoce por tirar balones fuera: que si estoy hecho un lío, que si fíjate tú que me gustas, pero no lo tengo claro, ES QUE YO TE LO DIJE,...y suma y sigue. 
Hasta que te pones seria y no les queda escapatoria y te dicen que mejor como amigos...y tú pensando: pero si yo amigos tengo muchos y a mí este tío me gusta, me pone, me ilusiona y demás...yo no quiero ser su amiga. Yo quiero el pack completo. 
Entonces te das cuenta de que tristemente es un muñeco vudú: Necesita la tortura, el dolor, la adrenalina del tecojo/tedejo,...para ellos lo que tú les ofreces es plano, predecible y banal. Quieren agujas atravesándoles el alma y ya saben que contigo, eso, no lo van a tener.
 
Entonces como son así de majos, quieren dejar la puerta abierta porque tú les convienes en su vida a pesar de que no sienten ni sentirán nada por ti. Eres la tirita que les devuelve cierta dignidad a su existencia de trapo mancillado. Pero tú deseas alejarte porque sabes que no te quieren, que te están utilizando y que no obtendrás nada de lo que TÚ ESPERABAS. Porque tú importas, porque mereces que te quieran. 
Llegados a este punto, puedes diferenciar a un muñeco vudú del resto de perfiles porque ellos van de buenos y de víctimas toooodo el rato. Frases típicas que oirás: 

- Si es que te entiendo muy bien, yo he estado muchas veces en tu lado y se lo que se siente.

- Yo te aprecio mucho y te necesito en mi vida. 

- Esto es un asco, siempre me pasan a mi estas cosas. 

- Es que tengo muy mala suerte, últimamente me pasa con muchas chicas, no sé si seré yo que tengo un problema. 

Y tú pensando, este tío es imbécil. Me está aquí destrozando el corazón y aún así le importa más su ombligo que el daño que me puede estar haciendo. 
El muñeco vudú es un egoísta pata negra amigas, porque es la VÍCTIMA histórica de su vida y no concibe ser verdugo, ser el ombligo de su drama personal es la línea de su discurso. Son los protagonistas eternos de su telenovela barata.

Y como no entienden que ellos pueden hacer daño, pretenden que les digas que todo está bien, que son grandes hombres, geniales y dulces que no harían daño a una mosca. En su egoísmo no respetan tu espacio, tus métodos para olvidarles, tus deseos para poder extirparles,...NO RESPETAN NADA. 

Al par de días te escriben como si tal cosa, ignorando el hecho de que les has pedido que no lo hagan. Quieren quedar contigo con cualquier excusa para asegurarse de que todo está bien, de que tú estás bien (esa es la parte donde ellos son los héroes y piensan que así se aseguran una baza para el futuro en tu memoria). Pero es una gran mentira, solo quieren que les digas que no hay mal rollo, que son estupendos y que a partir de ese momento seréis inseparables, los mejores amigos. Eso les devuelve su estatus de Pablo Alborán eterno. De guapo sensible y verdadero.


Pablito haciendo una transfusión de "mojo" a su clon.

Y tu que pensabas que había chicos buenos por ahí, caballeros con principios y almas sensibles, te das cuenta de que no...que a ti no te cae esa suerte. Tú eres a la que se follan, a la que vacilan, a la que le cuentan un cuento de hombres buenos y mujeres monstruosas, te enamoran con su caballerosidad, pero cuando te das cuenta...tú no tienes nada. Solo aire que se cuela helado por otro agujero terrible en tu corazón. ¿Como pudo colarse en tu vida? ¿Como pudo suceder? 

Empiezas a pensar que alguien te ha cogido ojeriza y no para de juntarte con los despojos de muñecos destripados, como un macabro juego al que no encuentras sentido alguno. Pero os prometo que hay una cosita que suele funcionar para ir combatiendo ese mal de ojo y la comparto, a ver si se nos mete en esta cabezota dura que tenemos: 

El que te quiere, te busca. Si no es así,...puerta.

No hay comentarios :

Publicar un comentario